Durante los últimos años, han sido muchas las personas que han creído que se puede mejorar de forma drástica la salud por medio de la alimentación y son muchos los mitos que se han ido formando a través de los meses en referencia a algunos alimentos.
Ya se sabe que un 92% de la población cree en algún mito sobre los alimentos y que muchos de ellos se repiten de una persona a otra.
Se come más por lo que se dice que por lo que realmente aporta un alimento
Son muchos los casos en los cuáles se ha dicho, por ejemplo, que un determinado producto produce cáncer, aunque a simple vista pueda parecer una afirmación exagerada, existen alimentos que cuentan con esa fama y que las personas han dejado de comer sólo por esa razón, y sí, sabemos que es una razón de peso, pero no hay ningún estudio que verdaderamente demuestre que da cáncer.
Otro ejemplo de lo que el “boca a boca” desinformado puede hacer es la relación que se le da al chocolate con la aparición de acné en adolescentes. Estos dos hechos están totalmente aislados…
Esto también funciona hacia el lado positivo. Cientos de personas han muerto porque en su día se dijo que el limón era milagroso y era capaz de curar las células cancerígenas siendo similar a la quimioterapia.
A nivel mucho mayor, se está penando para un futuro aún lejano, poner en las etiquetas de los productos las propiedades con las que cuenta que se hayan demostrado científicamente.
Son muchas las personas que basan su vida de igual forma a cierto tipo de alimentación _ como la alimentación ecológica o la vegetariana- pensando que esa es la que le va a dar mayor beneficio pero en realidad, se privan de otras muchas cosas necesarias para la salud. Las dietas que son sólo a base de frutas y verduras son perfectas durante un tiempo y siempre que estén acompañadas de otro tipo de alimentos.
